EXPOSICION DE PINTURA ARTISTA: GUILLERMO BUGEDO

Este martes 8 de Mayo se inauguró la exposición de Pintura “Gente de UCI”, cuyo autor es el Dr. Guillermo Bugedo, Ex Presidente de la Sociedad Chilena de Medicina Intensiva (SOCHIMI). La exposición, que reúne más de 50 piezas, en su mayoría retratos pintados al óleo, realizados en diferentes estilos pictóricos, estará abierta hasta el 25 de Mayo en el edificio Académico de la Escuela de Medicina de la Pontificia Universidad Católica de Chile, ubicada en Diagonal Paraguay 362. Los más de 100 asistentes que acudieron a la cita pudieron sorprenderse con el talento y la técnica del Dr. Bugedo, quien, además de compartir con los presentes algunas reflexiones relativas al proceso mismo de creación, se dio el tiempo con SOCHIMI para profundizar en el camino recorrido en este noble arte.

¿Cuándo comenzó a desarrollar su afición por la pintura?
Desde joven tuve interés por el dibujo y la pintura, con algunas acuarelas aceptables pero nada más. Gusto mucho -hasta el día de hoy- de visitar nuestro MNBA, asistir a exposiciones varias, etc., pero nunca había tenido un acercamiento formal con clases o asistiendo a talleres.  El año 2011 nuestro colega Tomás Regueira me comentó que su suegro y pintor, Joaquín Solo de Zaldívar, exponía en Casas de lo Matta. Fui, me gustó su estilo, hablé con Joaquín y comencé a asistir a su taller. Desde entonces me enamoré de los óleos y ya no dejé de pintar.

¿Cómo se compatibilizan la pintura con su trabajo profesional?
La principal limitante es el tiempo. A diferencia de la lectura o la fotografía, pintar significa disponer al menos 3 horas: debes planear el objetivo de la sesión, preparar los óleos y, al terminar, volver a limpiar pinceles, pinturas, ordenar, etc.  Lo más positivo es que me ha obligado a ordenar mi tiempo, y tratar de disponer una o dos tardes en la semana, habitualmente después de las 18 horas, más el fin de semana que puedo pintar incluso todo el día. Obviamente, en tiempos de mayor actividad académica o reuniones familiares la pintura queda algo rezagada…

Se dice que “el arte es una cura contra el estrés” y el intensivista habitualmente se encuentra sometido a una presión muy grande. En este mismo sentido: ¿hay alguna relación entre su arte y su profesión?
Sin duda, por nuestra profesión, estamos fuertemente involucrado en el dolor y el sufrimiento humano. En la UPC tratamos de mostrarnos serios, fríos en ocasiones, y tomamos decisiones muy difíciles, no siempre correctas.  Pero antes que doctores o científicos, somos humanos, con fortalezas y debilidades, y es imposible resistir esta coraza autoimpuesta sin reventar en algún momento. La literatura sobre burn-out en la UPC crece día a día. Es fundamental liberar nuestros sentimientos.
Cualquier forma de arte (pintura, fotografía, poesía, teatro, música, etc.) es un tremendo sustento para el alma. Cuando pinto, se produce un “switch” que te permite liberar tus emociones y disfrutar ese momento. Si miran los retratos de la muestra, he tratado –con diverso éxito- de captar el alma de esas personas. Hay muchas sonrisas, incluso carcajadas. Es mi visión de la vida y me permite sonreír junto a esos rostros felices. Ya es suficiente el dolor de la vida real.
Para quien vive a diario situaciones de tanto dolor y sufrimiento, el arte en general, y la pintura en particular, es un escape maravilloso y un antidepresivo insuperable.

¿Ha recomendado, alguna vez, el arte como terapia a los intensivistas más jóvenes?
Lo comentamos ocasionalmente en las visitas y reuniones, pero no en forma sistemática. Tal vez debiera ser parte del currículum básico de todos los profesionales de la salud, y no sólo de ellos.  Desde ya, lo recomiendo fuertemente.